El Árbol de la estricnina

El conocido vulgarmente como “Árbol de la Estricnina” es originario de India y pertenece a la familia Loganiaceae. Es caducifolio, de porte medio, con un tronco corto y delgado. Se lo denomina científicamente Strychnos nux-vomica, Contiene dos alcaloides considerados como los mayores venenos en el mundo entero: Estricnina y brucina. La primera se halla principalmente en sus semillas, que son planas y circulares; y la segunda en la corteza, que es suave al tacto y de color grisáceo. 

La ingestión de estricnina provoca convulsiones y aumento de la presión; mientras que la brucina provoca parálisis en los nervios motores. Hay paliativos para esos síntomas pero ningún antídoto; se las usaba antiguamente para eliminar animales que se convertían en plaga, como por ejemplo las ratas. Su madera clara, de alta densidad (a prueba de las temibles termitas), se emplea en la fabricación de muebles, para hacer ruedas de carretas y también instrumentos de labranza. 

Sus ramas son muy irregulares. Los brotes nuevos son de color verde oscuro y brillante. Tiene hojas pecioladas, ovales y acuminadas, con nervaduras paralelas y aspecto coriáceo en ambas caras; miden entre cinco y nueve centímetros; se ubican de manera opuesta. Da pequeñas flores bisexuales con forma tubular y de color verde muy claro, abren cuando aún hace frío y despiden un olor desagradable, se agrupan en inflorescencias de tipo cima. 

Los frutos son bayas esféricas de tres a seis centímetros de diámetro, verdes en su juventud y de color naranja al llegar a la madurez; tienen la piel lisa y dura; su pulpa es blanca y suave, en el centro de la misma hay una sustancia gelatinosa donde están las semillas, de una a cuatro; éstas, al secarse, adquieren un aspecto semi leñoso. 

Además de los alcaloides contiene glucósidos, alcoholes, ácidos y sales. En dosis bajísimas se usó como estimulante y afrodisíaco en el pasado; se presentaba como extracto, en polvo y también como tintura. En la actualidad hay preparados homeopáticos que contienen, presuponiendo que nadie va a ingerir una cantidad mayor a la que se le indique.