El Cotiledón

Conocemos por los nombres comunes de Cotiledón, u “Oreja de chancho”, a una planta suculenta de porte erguido que puede llegar a medir un metro de alto. Responde al nombre científico de Cotyledon orbiculata y forma parte de la familia Crassulaceae. Es originaria de África del Sur. Hoy en día está distribuida por todo el planeta y se la emplea como ornamento en parques y jardines, precisando muy poco mantenimiento. 

Tiene tallos robustos de color verde-blancuzco o verde-grisáceo. Sus hojas al tono, de entre siete y diez centímetros de diámetro, aunque presentan forma redondeada cuentan con un pequeño ápice; están dispuestas de manera opuesta y tienen los bordes rojizos; como es característico de las suculentas en su interior almacenan agua y para evitar la evaporación están recubiertas por una sustancia blanquecina que refleja la luz solar. 

Durante la primavera y el verano da pequeñas flores pendulares acampanadas, rojizo-anaranjadas (hay también variedades amarillas), que nacen agrupadas en inflorescencias terminales sostenidas por altos y fuertes pedúnculos florales de cerca de medio metro. 

Necesita ubicaciones con bastante sol durante varias horas por día, suelos con buen drenaje y temperaturas moderadas; se le debe proporcionar agua normalmente en los meses de más calor y retacearlo en los de menos; tolera cortos períodos de sequía pero no soporta las heladas fuertes; es bueno proporcionarle abono cada tanto, 

La propagación es muy sencilla, se efectúa a través de semillas o por esquejes de hoja o tallo, los que enraízan casi de inmediato. Puede tornarse invasiva si no se la controla. Se ha demostrado que su ingestión hace daño a los animales domésticos y de granja. Hay que protegerla de los caracoles.